El hombre contó que en el momento en el que Egan Bernal estaba empezando su carrera profesional en el ciclismo de ruta lo llamó para darle la sorpresa: “Me dijo: ‘Si quiere véngase para acá, que le compré un lotecito, ahí tiene su casa”.
Luego, entre lágrimas explicó cómo festejó la gesta de su nieto: “Fue una elegancia, me dio mucha alegría. Yo brincaba solito… Quiero darle un beso bien grande y apretarlo, y pedirle a la Virgen mucha salud para seguirlo viendo y felicitando”.
Finalmente, le hizo una solicitud especial: “Que me mande una cuchara [pala] para trabajar porque la garlancha se rompió”.
Entre tanto, uno de los vecinos del lugar invitó al pedalista a que los visite: “Le tenemos 10 pollos, gallina, una yuca y todo lo que hay aquí”.
En video, la casa del abuelo de Egan:
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