Contenido Patrocinado Nov 25, 2025 - 10:00 am

La Cuenta del Mar, una iniciativa creada por Bancolombia en alianza con WWF Colombia, superó una nueva meta en su propósito de conservar el mar y proteger la vida que depende de él: llegó al 60% de la meta trazada para el 2030, con desembolsos de más de 603 mil millones de pesos.

Esta línea de economía azul fue creada con el objetivo de preservar los ecosistemas marino-costeros de Colombia con la siembra de plántulas de mangle para restauración. Desde su creación, ha permitido financiar proyectos comunitarios que combinan ciencia, conservación, empleo y desarrollo sostenible en la región Caribe. Estas son algunas de las acciones más destacadas:

Crédito: Cuenta del Mar
Crédito: Cuenta del Mar

Retiro de residuos y aprovechamiento de material

La iniciativa logró retirar 1.427 kilos de residuos sólidos, de los cuales 1.059 kilos fueron reaprovechados.
Parte de este material se transformó en productos sostenibles a través de proyectos como Mangle Mi Huella Verde, que utiliza recursos recuperados del manglar para generar soluciones de uso cotidiano.

Siembra de 10.000 árboles de mangle

Para restaurar los ecosistemas estratégicos del Caribe, se sembraron 10.000 árboles de mangle, una especie clave para la salud de costas y ciénagas.
Además, se recuperaron 200 hectáreas del Corredor Sierra–Ciénaga, reforzando la conexión natural entre los ríos de la montaña y los humedales costeros.

Más de 433 empleos creados

Los proyectos han generado más de 433 empleos y capacitado a más de 500 personas en liderazgo ambiental, gobernanza y acción climática.
En total, 11 organizaciones comunitarias del Caribe han participado, fortaleciendo su autonomía y convirtiéndose en guardianes del territorio.

Limpieza de 6,7 km de canales hídricos

La limpieza de canales permitió mejorar el equilibrio entre agua dulce y agua salada, vital para los manglares, cultivos, peces y especies locales. También aumenta su capacidad para enfrentar el cambio climático.

Reconexión de 330.000 hectáreas de ecosistema

Gracias a este trabajo conjunto, se reactivó la conexión entre la Sierra Nevada de Santa Marta, la Ciénaga Grande y el mar Caribe, integrando estos territorios como un solo sistema ecológico y social.
El resultado: un impulso a la biodiversidad y al bienestar de las comunidades que dependen de este ecosistema único.

Con más de la mitad de la meta alcanzada, la Cuenta del Mar demuestra que la restauración ambiental y el desarrollo comunitario pueden avanzar de la mano.
El próximo objetivo: llegar al billón de pesos para 2030 y seguir recuperando los ecosistemas que sostienen la vida en el Caribe colombiano.