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En Colombia, para manejar un vehículo, los conductores deben cumplir con las normas de tránsito con el fin de garantizar la seguridad a las personas que componen las vías del país, ya que, de no hacerlo, pueden ser sancionados con multas económicas o, en algunos casos, penas de cárcel.
(Vea también: ¿Las multas de tránsito en Colombia tienen vencimiento? Conozca cómo funciona la prescripción
Por ejemplo, casos como manejar con la licencia suspendida o cancelada son faltas graves que, en ciertos casos, podría incluso derivar en la cancelación definitiva del documento y procesos penales que incluyen penas de cárcel.
¿Qué dice la ley sobre esta infracción?
El Artículo 26 del Código Nacional de Tránsito Terrestre (Ley 769 de 2002), modificado por la Ley 1383 de 2010, establece claramente que, si una persona conduce con su licencia suspendida o cancelada, se expone a consecuencias mucho más severas.
“El conductor que sea sorprendido manejando mientras su licencia se encuentra suspendida incurrirá en la cancelación definitiva de la misma”, indica el articulado.
Para ello, de acuerdo con el Ministerio de transporte, “la conducta de fraude a resolución judicial se encuentra establecido como una conducta punible en el Código Penal, por consiguiente, corresponde a los jueces de la república establecer la comisión de dicho delito, a través de un proceso judicial de esa naturaleza”.
Para ello, en el artículo 454 del Código Penal se encuentra la explicación y la posible pena por «fraude a resolución judicial o administrativa de policía». Esto abre la puerta a procesos judiciales por posibles delitos como falsedad en documento público o fraude procesal, según el caso.
¿Por qué pueden suspender o cancelar una licencia?
La misma Ley 769 establece los motivos por los cuales una licencia de conducción puede ser suspendida temporalmente o cancelada de forma definitiva. Aquí están las principales razones:
Suspensión temporal:
- Conducir en estado de embriaguez o bajo efectos de sustancias psicoactivas.
- Prestar servicio público en vehículo particular.
- Ser sancionado dos veces por la misma infracción en menos de un año.
- Fraude en cursos de tránsito: suspensión hasta 3 años
- Condiciones médicas transitorias que impidan conducir de manera segura.
- Decisión judicial.
Cancelación definitiva:
- Incapacidad física o mental permanente.
- Reincidencia en infracciones graves, como manejar ebrio luego de haber sido sancionado.
- Fallecimiento del titular.
- Conducir a sabiendas de que la licencia está suspendida.
- Comprobación de fraude en el proceso de obtención de la licencia.
- Prestación reiterada del servicio público de manera ilegal.
En cualquiera de estos casos, la autoridad de tránsito está obligada a notificar formalmente al infractor y a ordenar la entrega inmediata del documento. De no hacerlo, el conductor se expone a agravantes legales.
Como conclusión, conducir con la licencia suspendida o cancelada no es una falta menor. Las consecuencias pueden ser muy graves: desde la prohibición de conducir por 25 años, hasta procesos penales que impliquen cárcel.
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