Pese a que en el país hay un servicio público que llega a muchos puntos de las capitales, a comparación de varias de las grandes ciudades de Estados Unidos, por ejemplo, manejar se ha convertido casi en un esencial para poder moverse de manera más libre y un poco más segura. 

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Sin embargo, hay una gran cantidad de personas que tienen pavor de conducir por las calles de la ciudad debido a los riesgos que representa, el estrés que genera y la ansiedad que puede causar el hecho de estar entre más carros.

A esta condición se le conoce como amaxofobia y le ocurre a las personas cuando se sientan en el puesto de conductor y de inmediato se tensionan, comienzan a sudar, les cambia el estado de humor y, en algunos casos, hasta se bloquean al punto de no poder avanzar más. 

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Por qué se crea la fobia a conducir

Según la página web de Seguros Sura, en la mayoría de los casos esta situación sucede por haber vivido una experiencia traumática en el pasado, por lo que la mente lo asocia con algo negativo y por eso se rehúsa a querer repetirla.

De hecho, las causas más comunes por las que se puede crear esta fobia son:

  • Un hecho traumático: como se mencionó anteriormente, la persona pudo vivir un accidente de tránsito o pudo verlo, por lo que de inmediato la mente creó una barrera y quiere a toda costa evitar vivir una situación igual.
  • Estrés excesivo: en ciudades con gran congestión vehicular es estresante manejar debido a los trancones, el pito de los carros, las peleas, los gritos y la cantidad de actores viales que se presentan. Ante esto, el cuerpo también crea una barrera para no sentirse así de mal y por eso se puede presentar la amaxofobia.
  • Frustraciones: como todo en la vida, manejar requiere práctica y las habilidades y la confianza se van desarrollando a partir de las horas que se pasen en el volante. Sin embargo, muchas personas no aguantan el proceso y la frustración hacen que le cojan fastidio y temor a manejar.

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Cómo tratar la amaxofobia

Por su parte, para tratar esta condición, la página Psicoglobal explicó varios temas que hay que trabajar para ir superando el miedo poco a poco.

  • Terapia de relajación: apenas se entre al vehículo puede encender el aire acondicionado, respirar, entender el entorno y no sobrepensar la situación para que la persona este tranquila desde el inicio.
  • Exposición gradual al tráfico: no es buena idea salir en las horas más congestionadas para comenzar a manejar sino, al contrario, se recomienda hacerlo en altas horas de la noche o temprano en la mañana, ya que a esa hora no hay muchos carros y va a ser más llevadero el proceso.
  • Practicar el parqueo: esta es de las situaciones más complicadas y que pueden causar temor para manejar un vehículo, por lo que se recomienda practicar en un sitio seguro y con una persona que sepa dar consejos para así no aturdir al conductor.
  • Hacer un curso: puede que haya aprobado el curso obligatorio para sacar la licencia de conducción, pero si aún no se siente del todo preparado, es recomendable hacer un curso con personas especializadas para que le expliquen nuevas herramientas para no sufrir complicaciones a la hora de conducir por las vías.

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