Países como España y Francia ya expiden el pasaporte sanitario para turistas que, comprobadamente, demuestren que están vacunados contra el COVID-19 o tienen una prueba negativa con menos de 48 horas de vigencia. 

En el caso de España, los viajeros que arriben deberán haber completado la vacunación al menos 14 días antes de llegar, con las dosis de Pfizer, Moderna, AstraZeneca o Janssen, autorizadas por la Agencia Europea del Medicamento (EMA), o las chinas Sinopharm y Sinovac-Coronavac (autorizadas por la OMS).

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Sin embargo, la Unión Europea dejó a libre elección de cada país la decisión de aprobar o no las vacunas aceptadas para los turistas. 

Por ejemplo, en Francia, solamente se aceptarán personas con vacunas que cuenten con el visto bueno de la EMA (Pfizer, Moderna, AstraZeneca o Janssen). Para las personas no vacunadas, además de la prueba negativa, se requiere una cuarentena de 7 días si se viaja desde Sudamérica, detalló France 24. 

En Italia, uno de los países más golpeados por la pandemia, las cosas ya están retornando a la normalidad para los turistas que lleguen vacunados o con pruebas negativas de COVID-19 con menos de 48 horas de vigencia. 

Sin embargo, los viajeros sudamericanos (no vacunados) deberán estar en cuarentena por 7 días. El país permanece cerrado para los turistas que lleguen desde Brasil, India, Bangladés y Sri Lanka, añadió ese medio. 

Los viajes al Reino Unido son algunos de los más estrictos a nivel mundial. La rápida tasa de vacunación de los británicos y la presencia de varias cepas ha obligado a imponer estrictas cuarentenas de hasta 10 días para los turistas que lleguen desde Sudamérica y el Sudeste Asiático, agregó esa cadena. 

Sin embargo, esto cambiará para las personas ya vacunadas, una vez entre en vigencia el pasaporte sanitario, que ya está siendo entregado en 8 países de la Unión Europea, según esa organización. 

Alemania, Portugal, Grecia, Suiza, Polonia y los demás países de la Unión Europea prometen cumplir con los requerimientos técnicos para también emitir el pasaporte sanitario a turistas vacunados, pero con la autonomía de decidir cuáles vacunas son aceptadas y cuáles no.