A lo largo de los años han surgido diferentes creencias sobre el impacto del horno microondas en los seres humanos, dado que en un principio se habló de que las radiaciones podían desencadenar consecuencias negativas para la salud.

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Frente a esto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) indicó en 2005 que, si este electrodoméstico era usado siguiendo las instrucciones del fabricante, era totalmente seguro calentar o prepara alimentos. Sin embargo, existen algunos alimentos que no son recomendables cocinar en estos dispositivos ya que pueden perder nutrientes e incluso su sabor.

De acuerdo con la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), citada por El Comercio, estos son los alimentos que por ningún motivo se deberían preparar en un horno microondas.

  1. Arroz: recalentar o cocinar este cereal en este electrodoméstico puede aumentar el riesgo de intoxicación porque posee una bacteria llamada ‘bacillus’, la cual es resistente a altas temperaturas.
  2. Brócoli: cocinarlo en este aparato puede provocar una disminución de micronutrientes y su composición de fenoles, glucosinatos y Vitamina C se verá afectada.
  3. Champiñones: las propiedades de este alimento se destruyen fácilmente al ser sometidos a altas temperaturas. Además, los expertos señalaron que recalentar este alimento deriva en hinchazón y molestia gástrica.
  4. Pollo: no es recomendable cocinar este alimento en el microondas ya que el calor que emite no suele penetrar de igual manera en todas las zonas del producto y en el caso de este alimento es importante consumirlo bien cocido, ya que la salmonela es una bacteria común en las aves y si no se cocina lo suficiente el riesgo de tenerla se incrementa.
  5. Productos lácteos: calentar este producto en el horno microondas hace que se pierdan la mitad de los nutrientes, entre ellos la vitamina B12, en un 40 %.
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Según ‘California Childcare Health Program‘, estas son algunas pautas que las personas deben seguir para minimizar los riesgos derivados del uso de este electrodoméstico, además de una buena limpieza.

  • Nunca usar con la puerta del horno mal cerrada, doblada o dañada.
  • Usar con los recipientes adecuados (vidrio, cerámica, cartón, papel, plástico).