Durante un arresto, cuando ya el sospechoso estaba sometido sobre el capó del carro de la policía de Woodson Terrace, estado de Misuri, EE. UU., el agente que sostenía un furioso pastor alemán que no dejaba de ladrar lo dejó que se acercara al detenido.

Y no solo lo dejó acercar, sino que el perro de inmediato comenzó a morder las piernas y las pantorrillas del hombre, quien suplicaba para que separaran al animal.

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En el video se observa que ninguno de los 3 policías intenta hacer que el can deje de morder o jalarlo hacia un costado para que deje de hacerlo, a pesar de que el perro está atado a una correa que sostiene uno de los agentes, como lo muestra el siguiente video.

El caso de aparente brutalidad policiaca ocurrió el pasado 20 de septiembre, informa el portal Actualidad RT, que señala que el FBI ya se encuentra investigando la actitud de los agentes frente al afrodescendiente.

Los uniformados arrestaron al hombre porque hubo una denuncia de una entrada no autorizada del sospechoso a un edificio; presuntamente, el sospechoso habría proferido amenazas verbales contra los uniformados, lo cual no justifica que lo hubieran dejado morder por el perro.

Según el informe de los 3 policías, el hombre se resistió al arresto a pesar de que ellos le habían dicho que si se oponía, le soltarían al perro, lo cual, según lo que se aprecia en el video, tampoco justificaría las mordidas, pues en la secuencia el hombre ya ha sido sometido por dos de los agentes.

Los agentes incluyeron en su informe que el sospechoso habría estado bajo el efecto de anfetaminas, pues le hallaron rastros de esa droga en la requisa que le hicieron.

Lo cierto es que varios manifestantes se reunieron frente a la estación de policía del pueblo para exigir una investigación a los 3 agentes, que para muchos evocaron los abusos cometidos contra otros ciudadanos, como George Floyd, que fue asfixiado por un agente de la policía el 25 de mayo de 2020 y que causó una ola de protestas y de violencia en todo el país.

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