De lo primero que se conoció de la auxiliar de enfermería Blanca Zuluaga fue una imagen donde se le veía montada en una mula, mientras transitaba por una carretera destapada con toda su indumentaria de protección y un contenedor en donde llevaba la dosis de la vacuna contra el coronavirus.

La foto, según la revista Diners, la tomó un niño en Aranzazu, y para ese momento la mujer regresaba de una vereda en donde había ido a vacunar “contra el COVID-19 a un adulto mayor en condición de discapacidad”.

La imagen se hizo viral en cuestión de horas porque reflejaba el sacrificio que deben hacer cientos de trabajadores de la salud para cumplir con su labor, y fue aplaudida por usuarios en redes que felicitaron a la mujer.

“Mi trabajo es gratificante, aunque es bastante durito por todas las circunstancias que conlleva. Sin embargo, la gente en el pueblo ha sido muy agradecida por tener su vacunación y en el fondo quedo muy contenta”, comentó Zuluaga en entrevista con ese medio, que dijo que la mula en la que iba ese día era prestada.

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Como la historia de esta mujer fue tan destacada en redes, Noticias Caracol la entrevistó y publicó un corto video de cuando la enfermera cruza por un río montada a caballo, también para llevarles las vacunas a campesinos que viven en zonas alejadas.

“La gente que no puede llegar hasta la institución nos busca, se acerca y nos cuenta cuál es la dificultad con el usuario y entonces ahí concertamos para ir hasta la vivienda y lograr el objetivo”, manifestó la mujer.

En cuanto a la foto viral, dijo que eso fue en la vereda La Marina, y que se vio en aprietos para llegar allí por lo agreste del terreno.

“No es solamente lo lejana sino la dificultad para ingresar hasta donde el usuario que fuimos a vacunar: primero nos desplazamos en transporte desde aquí del hospital, y luego, hasta la casa había que andar un poquito”, recordó.

Zuluaga fue felicitada en publicó por el director territorial de Salud de Caldas, Carlos Heredia, que la calificó como “una persona con el corazón dedicado a sus pacientes, a la salud, y que tiene la sensibilidad humana, social y médica”.

En este informe quedó plasmado el sacrificio que hace esta mujer para cumplir con el proceso de vacunación, algo que se repite en las diferentes poblaciones del país en donde se aplican los inmunológicos.