La leyenda de Pablo Escobar, el narcotraficante y criminal más violento y oscuro de Colombia, se ha construido en torno a su fortuna y cómo logró convertirse en el séptimo hombre más rico del mundo gracias a su andanada delincuencial.

Parte de esa historia y de cómo, de manera errada, se convirtió en un icono de ascenso en las clases bajas colombianas de algunos sectores sociales, fue construida sobre lo que fueron sus posesiones y en especial, sus mansiones.

Aunque en Colombia es muy famosa la Hacienda Nápoles, que sigue en pie y se ha vuelto un lugar turístico, hay más construcciones con una historia increíble de diseño y de lujo.

(Le puede interesar: Congelan bienes del ‘Señor T’, socio de Pablo Escobar que pasó desapercibido 30 años)

Le contamos sobre estas mansiones y en qué se convirtieron tras 30 años de la muerte del ‘capo’ de la mafia

Las mansiones de Pablo Escobar

La Manuela

Esta hacienda, ubicada en el municipio de Guatapé, en Antioquia, tenía siete hectáreas y llevaba su nombre en homenaje a la hija menor de Escobar.

Tenía canchas de fútbol, piscina, helipuerto, pista de tenis, muelle para hidroaviones y paredes con doble fondo que se usaban como caletas del dinero del negocio del narcotráfico. Según las informaciones de investigación criminal, tenía cerca de 120 guardias criminales que la resguardaban.

Era la casa de descanso de Escobar y allí pasaba sus vacaciones, pues no podía salir del país.

En la actualidad, esta hacienda está en las ruinas y tiene proceso de extinción de dominio desde 2005.

@stefy.altamiranda Un sitio asombroso 😳 #vlog #tour #turista #visita #pabloescobar #viral #parati #fyp ♬ Creepy, scary, horror, synth, tension – Sound Production Gin

 Hacienda Nápoles

Esta es una de las construcciones más emblemáticas del delincuente, pues tiene como símbolo la avioneta en la que coronó su primer viaje de coca.

En esta hacienda quiso montar una especie de parque de diversiones que consistió en tener zoológico, canchas de fútbol, piscinas, parque temático y hasta plaza de toros

Hoy se conserva y es un lugar turístico en el departamento de Antioquia, luego de 15 años de abandono. En 2007 nace el proyecto del parque, pero también tiene predios entregados a las víctimas de Escobar.

La Catedral

En una de sus jugadas por escapar de la justicia, pero a la vez, escapar de sus enemigos, Pablo Escobar se hizo recluir en una cárcel en Antioquia, que hizo a su gusto y en donde hasta organizaba partidos con estrellas del fútbol.

La cárcel, que estuvo abandonada tras su fuga y posterior muerte, se convirtió en un monasterio y una especie de ancianato.