Elon Musk sorprendió a sus más de 110 millones de seguidores en Twitter al publicar un video en el que se le ve entrar sonriente a la sede de dicha red social cargando un lavamanos, imágenes con las que estaría dando a entender que, finalmente, compró dicha plataforma.

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El multimillonario escribió: “Entrando en la sede de Twitter, ¡asimílenlo!”.

De acuerdo con el New York Times, Musk debía asistir a varias reuniones con la compañía esta semana, ya que, por orden judicial, debe completar la adquisición de Twitter por los 44.000 millones de dólares pactados, como muy tarde este viernes, si quiere evitar ir a un juicio.

El jefe de Tesla trató de negociar una rebaja del precio de la operación, pero Twitter no aceptó y, finalmente, con el proceso judicial ya muy cerca, Musk se dio por vencido y anunció que accedía a cerrar la operación en los términos originales.

Un par de horas antes, el empresario había escrito: “Una cosa bella de Twitter es cómo empodera el periodismo ciudadano, las personas pueden difundir noticias sin prejuicios establecidos”.

Hasta hace unos días, algunos medios estadounidenses estaban especulando que el magnate tiene entre sus planes despedir el 75 % de la nómina que trabaja en Twitter.

El diario The Washington Post, aseguró que los recortes no solo afectarían al personal, sino también a la infraestructura de la empresa, y concretamente los centros de datos que permiten el funcionamiento de esta red que consultan al día más de 200 millones de usuarios.

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