Así lo aseguró Quartz, que también señaló que los ladrones se hacían pasar por suscriptores de teléfonos para conseguirlos de una manera más sencilla.

De acuerdo con la autoridades, estas personas usaban identificaciones y tarjetas de crédito falsas. Con ellas, ingresaban a las tiendas para hacerse pasar por clientes reales que querían cambiar sus equipos antiguos.

Para hacer el cambio de los teléfonos es necesario elegir un plan para pagar una cuota mensual. Aparentemente, los delincuentes tomaban esta alternativa para hacer pagos mucho más bajos y porque las víctimas no descubrían el daño fácilmente, según iPadizate.

Además, las autoridades aseguran que, después, vendían los iPhone en el mercado negro.

De esta manera los delincuentes se salieron con la suya durante muchos años y, por esta razón, la compañía de la manzana optó por patentar un nuevo sistema de seguridad para evitar robos en sus tiendas, ya que este no ha sido el único robo masivo que ha sufrido, según este portal.