También deja al descubierto que los únicos ganadores con esa confrontación son Álvaro Uribe y Gustavo Petro, y que en la polarización en que tienen atenazado al país los que son manipulados son los ciudadanos del común.
“Obviamente esta pelea viene de las entrañas de la historia de la violencia en Colombia, la retroalimentación entre la violencia de derecha y la violencia de izquierda y sus vínculos con la política”, planteó Forero en la emisora. “La guerra militar entre guerrilla y paramilitarismo quedó atrás, pero sigue la guerra política”.
Forero se refiere a la andanada de Petro en Twitter atacando a Uribe y a la actual vicepresidenta Marta Lucía Ramírez. Pero esta no es más que la continuación de una pelea que vienen escalando el líder del Centro Democrático y el de la Colombia Humana desde la noche de este martes cuando participaron en una plenaria del Senado.
En principio, Uribe aseguró que Petro se había reunido 3 veces con el jefe paramilitar Carlos Castaño. Y también que había recibido un millón de dólares del cartel de Cali. En respuesta, Petro le dijo que había un desface de tiempo, y le agregó: “No soy como usted”. La situación hizo que este miércoles se volvieran tendencia las etiquetas #PetroParaco y #UribeEstaAsustado.
“Esta pelea es la radiografía de la política colombiana de hoy, es la radiografía de la campaña presidencial anterior que se movió entre los miedos y odios a Uribe y a Petro, y muy seguramente de la próxima campaña [presidencial]”, siguió el analista en la emisora.
“No es una pelea entre dos políticos. Es la retroalimentación entre el populismo de derecha y el de izquierda, del caudillismo de extremos, porque ambos son caudillos, no son unos senadores. Es la radiografía de una tenaza política que tiene atrapado a este pobre país, porque esos dos fenómenos son los que mueven la política electoral. Los partidos ya no la mueven. Estos señores superaron eso hace rato”, añadió Forero.
Y remató con la tesis central de su análisis: “Se están alimentando. Se necesitan, se sirven el uno al otro. Fíjese cómo monopolizan la política, monopolizan los medios. Aquí no estamos hablando de los grandes temas del país, sino de los vínculos vergonzosos de ambos [Uribe y Petro] con su pasado”.
En la misma frecuencia, el periodista Felipe Zuleta aseguró al respecto: “La verdad, no por nivelar por lo bajo, es que tanto el senador Uribe como el senador Petro tienen muuuchos huesos en el clóset, y se van conociendo poco a poco”.
“Trino de Petro va, trino de Uribe viene: la verdad es que sí está bien jarto el ambiente”, dijo el periodista Juan Fraile, de Caracol Radio, al reportar, con evidente fastidio, la confrontación entre los dos políticos.
“Lo de Petro y Uribe está rebasando el límite de prudencia”, acortó, por su parte, el jurista Hernando Herrera, director ejecutivo de la Corporación Excelencia en la Justicia y miembro del equipo de esta emisora. “Lo que está en juego es la institucionalidad del país”, subrayó Herrera, también incómodo. “Una cosa son las diferencias ideológicas, pertinentes, necesarias en una democracia, clarísmo que sí, y otra cosa son los excesos personales del uno y del otro contra sus familias y contra ellos mismos”.
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