La sanción la impuso un tribunal de arbitramento de la Cámara de Comercio de Bogotá, que ordenó el pago a los operadores Transmasivo S.A. y Somos K, encargados de poner a circular buses por las troncales de las avenidas Las Américas, Suba y NQS, informó El Espectador.

De acuerdo con la medida, Transmilenio deberá indemnizar con 28.800 millones de pesos a Transmasivo y con 23.400 millones de pesos a Somos K, añadió el medio.

En el año 2002, durante la administración de Antanas Mockus, se adjudicó la licitación para la operación de la segunda fase del sistema masivo, que incluía la prestación del servicio en la vía que conecta la capital con el municipio, indicó el diario.

De acuerdo con el cronograma presentado en la licitación, la ruta Bogotá-Soacha debía entrar en operación en mayo de 2005 (administración de Luis Eduardo Garzón). Sin embargo, esta troncal empezó a operar hasta diciembre del 2013 (gobierno Gustavo Petro). Tres administraciones y nueve años después.

La denuncia de los dos operadores argumentaba que por las demoras en la entrada de operación del corredor de Soacha, ellos tuvieron que poner a circular sus buses por otras rutas de la fase II, durante 16 meses adicionales, para cumplir con los 400 millones de kilómetros de recorrido para los que fueron contratados.

Esa operación extra los habría llevado a cancelar otros gastos que no les correspondían.

Entre tanto, la empresa de Transmilenio podría recurrir al recurso de apelación contra la decisión.

Cabe recordar que las finanzas del sistema masivo están en riesgo, pues en la actualidad la empresa tiene un hueco financiero que ronda los $800.000 millones anuales, refirió el medio.