La incautación ocurrió en un operativo en el que estuvieron la Fiscalía General de la Nación y el Invima, que hallaron todo tipo de elementos para la hacer el licor fraudulento.

El Invima contó que, en total, fueron 9 diligencias de registro y allanamiento que permitieron el decomiso de los elementos que facilitaban la adulteración de trago por parte de criminales.

Entre los elementos decomisados hay:

  • 83.000 botellas de licor adulterado
  • Tapas
  • Etiquetas
  • Capuchones
  • Botellas
  • Estampillas
  • Pimpinas
  • Sellos de seguridad

Encima, cuenta el Invima, había 10 unidades de maquinaria artesanal empleada para el empaque de los licores y 1.000 litros de líquidos como alcohol, varsol y saborizantes.

Lee También

Millonada en incautación contra el licor adulterado

Las autoridades cuentan que se incautaron estupefacientes y diez millones de pesos en efectivo.

Pero ese valor es mínimo en comparación con todo el material incautado. El Invima dijo que esos elementos valen, aproximadamente, cuatro mil ciento cincuenta millones de pesos.

En ese operativo también hubo 9 capturas debidamente legalizadas ante un juez de control de garantías. Los cargos por los que tendrán que responder son:

  • Concierto para delinquir
  • Corrupción de alimentos, productos médicos y material profiláctico
  • Usurpación de derechos de propiedad industrial
  • Ejercicio ilícito monopolístico de arbitrio rentístico

Los detenidos, además, se enfrentan a multas por un valor de $77’390.096, anotó el Invima.

Lugares en dónde distribuyen licor adulterado

De acuerdo con la entidad, el trago alterado era repartido en Bogotá y en diferentes lugares como Soacha, además de Garzón y Pitalito (Huila). 

Whisky y aguardiente de marcas reconocidas en el mercado eran los productos más distribuidos y eran elaborados sin el cumplimiento de las condiciones sanitarias requeridas a partir de alcoholes y otros licores de baja calidad.

La comercialización de estas bebidas adulteradas se hacía en diferentes cigarrerías y discotecas de barrios. Además, usaban locales comerciales de venta de confitería como fachada para poder ofrecer venta de licor a domicilio.