Al frente de la cárcel Anayanci de Quibdó (Chocó), un terrible atentado terminó con la vida del administrador de un negocio de comidas rápidas y dejó herida a otra persona.

“Dos sicarios pasan a bordo de una motocicleta, indiscriminadamente disparan a un establecimiento de comidas rápidas”, dijo el coronel Diego Córdoba, comandante de la Policía del Chocó.

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La comunidad aseguró sentirse sitiados por la situación de orden público, en lo que va del año, se han registrado más de 170 homicidios y decenas de comerciantes cerraron sus establecimientos debido a las múltiples extorsiones por grupos al margen de la ley.

Por medio de redes sociales, un comerciante nocturno le dio a conocer a sus clientes que cerraba sus puertas.

Al parecer, la ola de violencia lo dejó en quiebra: “El último adiós de lo que fue Barra Nivel 3, ya no vamos más, hasta aquí llegamos”, explicó.

“Han cerrado negocios por la pandemia y por la ‘plomemia’, la cantidad de plomo y amenazas que circulan en la ciudad”, añadió.

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