El exjefe guerrillero —cuyo nombre de pila es Zeuxis Pausias Hernández Solarte y permanece capturado desde el 9 de abril por señalamientos de narcotráfico— tomó esa decisión para continuar con su defensa política y jurídica ante la JEP, según un tuit del movimiento político.

Jesús Santrich, incluso, envió una carta desde la sede del Episcopado colombiano, donde fue acogido el pasado 10 de mayo debido a su grave estado de salud por la huelga de hambre.

También emitió un comunicado de prensa para oficializar su decisión y agradecer las muestras de apoyo de sus seguidores:

“Que nuestros sueños de paz se hagan realidad. Durante los 40 días que lleva la huelga de hambre, mi última batalla por la dignidad revolucionaria contra la injusticia y la mentira, he recibido las más variadas y hermosas expresiones de afecto y solidaridad”.

El artículo continúa abajo

Santrich es acusado de conspirar para el envío de 10 toneladas de cocaína a Estados Unidos después de la firma de los acuerdos de paz en La Habana, donde participó como negociador de los acuerdos.