Son al menos 3 los casos que se han conocido en los últimos días, en los que los ladrones llegan disfrazados de rappitenderos y asaltan a clientes de restaurantes en Bogotá.

Son dos hombres que visten ropa de Rappi, y uno porta en su espalda el maletín característico de los trabajadores de la empresa, donde seguramente guarda los elementos hurtados y recorre la ciudad sin despertar sospechas.

Sin embargo, no se tiene certeza de si se trata de bandas diferentes que están sometiendo a los ciudadanos bajo la misma modalidad o si son los mismos dos delincuentes los que cometieron los 3 atracos con arma de fuego.

Ante la difusión de las imágenes de los atracos que se registraron en establecimientos de Chapinero y Usaquén, norte de Bogotá, Rappi salió a referirse a la situación que ha afectado a decenas de ciudadanos.

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En primer lugar, la empresa mostró su rechazo al uso malintencionado e ilegal de nuestra marca e imagen y añadió:

“Estamos en contacto permanente con las autoridades locales y les hemos extendido nuestra disposición y compromiso para colaborar en cualquier investigación sobre este tipo de acciones”.

Rappi no precisó si ha podido identificar a estas personas y si tiene indicios de que sean personas que estén o hayan estado vinculadas a su servicio, o si obtuvieron los elementos alusivos a su marca también de forma ilegal.

La empresa indicó que “el uso ilegal de las marcas por parte de delincuentes es una modalidad criminal” que no solo la afecta a ella y por eso invitó a los ciudadanos a denunciar de manera activa.

Por último, indicó que rechaza “cualquier tipo de hecho delictivo que ponga en riesgo a las compañías y a los ciudadanos”.

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