Luego del regreso de la política a Colombia, se abren los interrogantes sobre qué pasará con el escándalo que protagonizó en Honduras por los 68.000 dólares que le fueron incautados por no declararlos. El caso es tan delicado que podría terminar en un proceso por lavado de activos.

El dineral que le fue decomisado a Piedad Córdoba se quedó en manos de las autoridades hondureñas y el caso permanecerá activo hasta que verifique la procedencia de ese dinero. Precisamente, sobre el origen de los fondos, la colombiana habría dado tres explicaciones distintas, lo cual aumenta las suspicacias al respecto.

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La portavoz del Ministerio Público, Yuri Mora, declaró a Semana que el trámite puede durar máximo 30 días. En ese término, la Fiscalía deberá presentar un informe sobre el caso y Córdoba tendrá que justificar de dónde salió esa plata.

Si la política colombiana no logra explicar el origen de dichos fondos, podría ser objeto de un proceso por lavado de activos. Si se determina que la plata hace parte de ilícitos, tendría que enfrentar una pena de 6 a 15 años en prisión.

¿Piedad Córdoba busca asilo en Honduras?

Al parecer, la senadora electa se ha reunido varias veces con la presidenta de ese país, Xiomara Castro. Pese a que todo indicaría que la razón de esos encuentros es su amistad, en Honduras investigan cuáles son sus lazos.

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Los rumores de que estaría buscando asilo están sustentados en los nexos entre Córdoba y la familia Zelaya. Prueba de ello es que este año ha viajado dos veces a Honduras. Por tanto, según Semana, al no encontrar inmunidad bajo la figura de senadora, ese país sería el destino para albergarla en calidad de asilada en caso de que así lo requiera.