Y es que ya es prácticamente un mes el que los menores han estado perdidos en las selvas del sur del país sin que se hallen más que algunos rastros de su supervivencia, sin pistas que realmente parezcan conducir a ellos.

Por eso la situación está dando campo a que algunas personas comiencen a creer en otros factores, como lo hizo el indígena uitoto que estuvo 20 días en la zona.

En diálogo con Blu Radio, Hernández aseguró que los menores “están ‘encantados’ por la madre selva”, algo que se viene comentando en voz baja después de que incluso algunos rescatistas dijeran que estuvieron a menos de 100 metros de ellos sin poder hallarlos.

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Además, el indígena añadió que “es necesario realizar unos ‘trabajos chamanísticos’ para que los niños regresen hacia los humanos”. Esto parece coincidir con la versión del abuelo de los niños, quien cree que “alguien los está cargando”, pero refiriéndose más precisamente a un “algo” que no sería humano.

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El grupo de indígenas con el que Faustino se adentró en la selva para buscar a los niños tuvo que abandonar su misión por motivos de salud, aunque las fuerzas especiales del Ejército se han mantenido en la búsqueda.

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La buena noticia que dio a la emisora, es que los niños sí habrían consumido algunas de las raciones que se arrojaron por toda la zona: “Ellos comieron de esa ración que tiró el Ejército, comieron la galleta, la chocolatina y se llevaron el mañoco”, cita Blu.