“Fue una mañana diferente, apenas nos asomamos a la ventana vimos a lo lejos algo blanco, parecía granizo o nieve. Yo nunca había visto eso”, dijo Luis Javier Dagua Cayapú, coordinador ambiental del resguardo Triunfo Cristal Páez, a la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca (CVC).

La nieve sorprendió a los indígenas, que organizaron un recorrido para verla de cerca.

“Cuando llegamos allá nos dimos cuenta de que era nieve. Jugamos con ella, era bien suavecita, era muy chévere”, agregó el hombre.

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El fenómeno tuvo lugar por “los comportamientos atípicos del clima”, indicó Noticias Caracol. La última vez que se presentó en Las Tinajas fue en 1998.

Es una condición que no se presentaba desde hace 20 años. Estamos haciendo un monitoreo porque se están beneficiando mucho las cuencas altas que este páramo alimenta. Es un páramo que aporta mucho caudal al río Fraile”, manifestó Rubén Darío Magerón, director de la CVC, al informativo.

Carlos Hernando Navia, director regional suroriente de la CVC, también resaltó el papel de los páramos de surtir de agua a los ríos:

“Las condiciones del suelo del páramo y su formación más o menos es un colchón que regula y mantiene agua por su baja temperatura, bajas tasas de descomposición de materia orgánica, entonces se almacena mucha agua que se va soltando poco a poco y va nutriendo el sistema lagunar y las principales quebradas“.

 

“Por ejemplo, en este caso es el río Fraile, que genera muchos servicios ambientales hacia la producción agropecuaria en zona plana”.

Las autoridades ambientales y las comunidades indígenas de la zona protegen este páramo y los otros 3 que tiene el Valle del Cauca (en Buga, Tuluá y los Farallones de Cali), de acuerdo con el medio.