En un texto de tres puntos, Medicina Legal detalló que a su sede de Villavicencio (Meta) llegaron 10 cuerpos el pasado 4 de marzo.

Eso fue dos días después de la operación por aire y tierra que el Ejército adelantó contra las disidencias de alias ‘Gentil Duarte’, que el Gobierno considera como una estructura narcocriminal.

Ese 2 de marzo se registró un bombardeo cerca de la frontera entre Guaviare y Caquetá, cerca de la vereda Buenos Aires del municipio de Calamar, en el que habrían muerto varios menores de edad reclutados forzosamente y que estaban en el campamento.

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Justamente, Medicina Legal detalló que fue el “personal de policía judicial en la vereda Buenos Aires de Calamar” el que adelantó las primeras inspecciones a los cuerpos.

Luego, la entidad detalló que la información que ha salido en medios “sobre las identidades de los cuerpos no es oficial” ni ha sido proporcionada por sus funcionarios, pues no han determinado nombres ni edades de los muertos.

El instituto forense aseguró que “las labores científicas continúan y los resultados serán informados cuando se tenga plena certeza sobre las identidades”. Dicho informe lo recibirá el fiscal del caso.

El Ministerio de Defensa confirmó este lunes que tenía conocimiento de que en el campamento había menores de edad, y por el momento confirmó la muerte de 10 personas, a las que calificó como “integrantes de esa estructura criminal”, pero sin referirse a sus edades, y advirtió que las operaciones del Ejército continuarán.