Eso, como la “definición de todas las formas de lucha”, que, en este caso, “es susceptible de ser ordenada y respaldada desde Caracas, Bogotá, Bruselas y hasta Moscú”, advierte Vélez en su columna del diario capitalino.

Y es que, para él, si bien el acuerdo que logró el Gobierno con los indígenas del norte del Cauca para despejar la vía Panamericana constituye “un logro evidente de esta administración”, “una importante victoria en medio de una situación perfectamente dispuesta para el fracaso”, también hay un coctel “de incentivos perversos y actores complejos” que hacen de esta solución “algo frágil”.

Ese coctel lo constituyen, según Vélez, “el respaldo de las Farc, Eln y otras organizaciones al margen de la ley; el oportunismo político de algunos que aprovechaban para azuzar a los indígenas en contra del establecimiento, la supuesta injerencia de Maduro para distraer a Duque del tema Venezuela, la intransigencia propia de colectivo indígena que ha visto cómo gobierno tras gobierno le incumplen lo negociado y la presión del ala más radical del Centro Democrático para que se usara la fuerza de manera contundente”.

De hecho, aunque Vélez no lo menciona, este fin de semana fue tendencia el trino después eliminado del expresidente Álvaro Uribe en el que dijo: “Si la autoridad, serena, forma y con criterio social implica una masacre es porque del otro lado hay violencia y terror más que protesta”.

Álvaro Uribe

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“Es increíble a cuánta gente le conviene que al país le salgan las cosas mal”, concluye Vélez su columna.

En un sentido similar se manifiesta Luis Felipe Gómez Restrepo en El País, de Cali, para quien la minga indígena “se ha complejizado por actitudes extremas de grupos armados que están convulsionando la región y las posiciones ideológicas de izquierda y de derecha que inyectan ruido y traban cualquier principio de solución”.

Gómez Restrepo ve que, “infortunadamente, hay algunos insensatos que quieren hacernos regresar a la guerra. Y frente a esta pretensión la respuesta debe ser firme: ¡No!”. También advierte que “han aparecido unos cuantos políticos haciendo gala de la demagogia. Oportunistas irresponsables”.