Quintana había sido secuestrado cuando se dirigía al departamento del Huila, según el general Óscar Atehortúa, director de la Policía, y fue puesto en libertad este lunes 7 de diciembre en la tarde, informaron fuentes diplomáticas.

La embajada española en Colombia confirmó a la agencia Efe la liberación y dijo que el embajador Pablo Gómez de Olea habló telefónicamente con Quintana, quien está camino a su domicilio en Cali, Valle del Cauca.

“Por su origen extranjero” le había llamado la atención a los criminales que lo secuestraron, informó la policía. El general Atehortúa no mencionó qué grupo de delincuentes fue el que perpetró el secuestro.

La banda, de la que se desconoce el nombre, “se vio obligada a soltarlo” por la presión que ejercieron fuertes operativos de la fuerza pública en la zona, apoyada por la población local.

El director general del CIAT, Juan Lucas Restrepo, celebró la noticia en Twitter. “Jesús Quintana ha sido liberado. Camino a casa. Está sano y salvo. Estamos felices!!”, escribió.

Lee También

El experto español llegó a Colombia desde el pasado 25 de marzo y se ha destacado por impulsar proyectos para el desarrollo de tecnologías que ayuden a la seguridad alimentaria y a enfrentar los problemas de los recursos hídricos de la Amazonía.

El español estaba en Colombia para ofrecer soluciones científicas

El CIAT está presente en decenas de países y, según su sitio web, ofrece “soluciones científicas” para transformar los “sistemas alimentarios” alrededor del mundo. Quintana estaba a cargo de una sucursal de la organización en la ciudad de Cali (suroeste).   

Cauca es una de las regiones más castigadas por el rebrote de la violencia en Colombia, que atraviesa una de las peores arremetidas de los grupos armados desde la firma de la paz con la guerrilla marxista FARC en 2016.

Cuatro indígenas fueron asesinados la noche del sábado en este departamento, donde guerrilleros del ELN, grupos armados de origen paramilitar, bandas de narcotraficantes y rebeldes que se apartaron de los acuerdos de paz firmados por las Farc se disputan más de 17.000 hectáreas de cultivos de coca.