La persona fallecida, de 56 años de edad, era un habitante de calle de ese sector y quien colaboraba a los vecinos. Al verlo tendido en el suelo por más de 8 horas, las personas se dieron cuenta que estaba sin signos vitales, pero se negaron a llevarse el cuerpo, informó Noticias Caracol.

Según la declaración de las autoridades, citadas por ese medio, el hombre murió al parecer por un infarto. A pesar del llamado de la comunidad, el personal médico que llegó de la ambulancia se negó a practicar el levantamiento.

“Lo socorrimos y llamamos a una ambulancia, a la Policía y a la Defensa Civil. Vinieron todos, pero igual no se lo llevaron”, contó un testigo del hecho.

La situación causó indignación e indolencia de los habitantes de la zona, pues aseguraron que todos tienen derecho a morir dignamente. Por ahora se anunció una investigación para esclarecer por qué la demora.

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Mientras las autoridades iniciarán el estudio del caso, los ciudadanos continúan exigiendo cristiana sepultura.