En el mismo punto en que piden el “corredor humanitario” para devolver los despojos del periodista Javier Ortega, el fotógrafo Paúl Rivas y el conductor Efraín Segarra, el grupo armado solicita la liberación de las personas (“guerrilleros, milicianos, civiles”) retenidas en Ecuador y Colombia.

También asegura que con los cuerpos de los tres trabajadores del diario El Comercio entregará a la pareja que mantiene secuestrada, a quienes califica de “miembros de la inteligencia ecuatoriana”.

“El señor Lenin Moreno [presidente de Ecuador] ha trazado un plazo equivocado [no se sabe si se refiere a los diez días que le dio Moreno para que se entregara], como lo es también el camino de la guerra contra nosotros”, dice en otro de sus apartes el comunicado.

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En otro punto, pese a los señalamientos de que esta disidencia de las antiguas Farc se degradó hasta consolidarse como un grupo narcotraficante, sostienen que son “una guerrilla con principios, Marxistas, Leninistas y Bolivarianos”, y agrega que por esos ideales “luchamos y seguiremos luchando”.

“Solo hemos pedido a los Ecuatorianos que no ataquen nuestras tropas guerrilleras, para que logremos un buen acuerdo en la frontera”, añade el panfleto.