El gobernador de ese departamento, Javier Eliécer Zapata Parrado, pidió ayuda al Gobierno Nacional para mitigar los efectos de la ola invernal.

“Ya son más de 7,700 personas damnificadas en el área urbana del municipio de Inírida y más de 15.600 familias en la jurisdicción departamental que comprende corregimientos, resguardos indígenas y comunidades dispersas”, señaló Zapata en declaraciones difundidas por El Tiempo.

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A su vez, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastre (UNGRD) precisó que las cifras oficiales indican que 3.534 familias resultaron damnificadas a causa de “las intensas y prolongadas precipitaciones” que, según El Espectador, no se presentaban con igual intensidad desde hacía 40 años.

La Unidad de Gestión de Riesgo ha entregado 1.300 mercados, 1.300 kits de aseo, 1.450 sabanas y 1.450 frazadas para las familias de Inírida como para las zonas rurales de Cacahual, Puerto Colombia, San Felipe y Guadalupe, de acuerdo con un comunicado de esa entidad.