author
Escrito por:  Fabián Ramírez
Subeditor     Mar 10, 2025 - 8:34 am

Entre el 6 y el 8 de marzo, un grupo de 28 policías y un militar vivieron uin calvario al ser secuestrados por el frente Carlos Patiño, perteneciente a las disidencias de las Farc, en un suceso que tuvo lugar en El Plateado, Cauca. Según las víctimas, fueron llevados al caserío La Hacienda y retenidos durante tres días en condiciones difíciles y amenazantes, aunque no estuvieran físicamente atados.

(Vea también: Vuelven a secuestrar uniformados recién liberados en Cauca; comisión humanitaria, retenida)

Durante su cautiverio, les fue proporcionada alimentación tres veces al día; sin embargo, la presión psicológica fue intensa. “Nos amenazaban constantemente con quemarnos vivos si exigíamos nuestra libertad; fue un escenario muy duro y de mucho miedo”, mencionó en El Tiempo uno de los policías liberados, quien prefirió mantener su anonimato, tras llegar a Bucaramanga.

El patrullero Jhon Manrique, quien también estuvo entre los retenidos, narró a medios locales cómo los guerrilleros confiscaron sus celulares y municiones, además de quemar los escudos de la institución, actos que sumaron a la tensión del cautiverio. Los familiares de los retenidos vivieron momentos de angustia durante el secuestro. Sandra Milena Ramírez, pariente del subintendente Carlos Pita, expresó su gratitud al reencontrarse con los uniformados sanos y salvos, según el rotativo.

“Cuando me enteré de su situación fue agonizante. Antes de ser secuestrados, Carlos me llamó pidiendo oraciones, eso aumentó nuestra preocupación y angustia”, confesó Sandra Milena en el citado diario. Por otro lado, la abuela de Javier Valenzuela compartió el impacto emocional que tuvo el incidente en su familia. “Fue una prueba muy dura; hicimos cadenas de oración y seguimos orando por ellos. El miedo y la incertidumbre fueron constantes”, comentó con voz entrecortada.

Lee También

A su llegada a la ciudad, los policías fueron recibidos en el aeropuerto internacional Palonegro con una calurosa bienvenida. Familiares y amigos les esperaron con carteles, globos y una calle de honor organizada por la Policía de Bucaramanga, momentos que fueron de enorme impacto emotivo para todos los presentes.

El general Henry Yesid Bello, comandante de la Policía de Bucaramanga, informó que siete de los uniformados secuestrados habían sido enviados desde Bucaramanga a El Plateado para reforzar las operaciones en la región.

* Pulzo.com se escribe con Z

Lee todas las noticias de nación hoy aquí.