De acuerdo con la denuncia que hace la familia González, minutos después de haberse perpetrado el ataque cerca a la plaza de toros La Santamaría, este domingo, cerca de 20 uniformados allanaron la vivienda, ubicada en el barrio La Perseverancia (centro de Bogotá), informó Noticias Caracol.

Los policías, según el noticiero, ingresaron a la residencia argumentando que un ciudadano había llamado a la línea única de emergencia (123) informando que en ese inmueble se escondían las personas responsables de detonar el artefacto que dejó 31 personas heridas.

Jhon González, propietario de la vivienda, indicó en el medio que hicieron falsos señalamientos sobre su familia y nadie responde por los daños:

Hacen un llamado de auxilio en el que dicen que yo tengo una persona secuestrada, que la había torturado, la había matado y descuartizado. Pensaron que yo tenía explosivos, entraron y no encontraron absolutamente nada. Los daños quedaron y ahora no tengo cómo cerrar la puerta”.

Además, esta familia denuncia que dentro del inmueble los uniformados revolcaron cada rincón, revisaron sus dispositivos de comunicación y luego pidieron disculpas al percatarse que no tenían ninguna relación, agregó el informativo.

El dueño de la casa rechazó que después del allanamiento se hubiera perdido un computador, donde guardaba información indispensable:

Si se cometió un atentado terrorista cerca a la casa ellos si podían entrar, nos hubieran contactado y con mucho gusto les damos acceso a la casa pero no entren de esa forma. Si ya entraron, está bien, ya lo hicieron pero no nos roben las pertenencias. Se perdió un computador marca Apple que guardaba información importante”.

Entre tanto, el noticiero aseguró que comentó esta situación con la Policía para aclarar el presunto abuso de autoridad, pero las autoridades no se refirieron al tema.