La situación del vecino país ha llegado al “dramático punto” en que está, asegura este columnista, no solo por “la corrupción, las medidas erráticas o la ineptitud de la tiranía venezolana”, sino por “la indolencia de muchos (dirigentes políticos, sociales y empresariales ubicados a lado y lado de nuestra frontera común) que se han lucrado política y económicamente de esta situación”.

“En cuanto a réditos políticos, no son pocos los caciques colombianos que han usado como plataforma el caso de nuestro vecino para lanzar sus propuestas políticas”, agrega Vladdo, y dice que sería interesante saber “dónde estaban todos esos líderes de la oposición venezolana cuando Uribe le cambió a punta de trampa un articulito a la Constitución nacional para hacerse reelegir la primera vez”.

También se pregunta “¿cómo reaccionaron cuando Uribe quiso torcerle el pescuezo a la ley para hacerse reelegir por segunda vez? ¿Cuántos de ellos se pronunciaron cuando se conocieron los ‘falsos positivos’? ¿Qué dijeron esos paladines de la democracia sobre los más de tres mil civiles asesinados por las fuerzas del Estado durante el mandato de Uribe? ¿Cuántos fueron a consolar a las madres de Soacha o a acompañarlas a pedir justicia en los tribunales internacionales de derechos humanos, mismos donde hoy denuncian ellos los crímenes de la dictadura de Maduro?”.

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“Muchos de esos que hoy con toda la razón se rasgan las vestiduras por las atrocidades cometidas por Maduro y sus secuaces son los mismos que aplaudían a Uribe cada vez que podían”, escribe Vladdo. “Yo los vi. Yo los oí. Yo estaba ahí cuando decían: ‘Ojalá en Venezuela tuviéramos un presidente como Uribe’; sin importarles que este tratara de hacer trizas nuestra institucionalidad hostigando a las cortes, chuzando a la oposición o persiguiendo a la prensa”.