Sin mencionar a nadie en particular, aseguró en su columna de El Espectador que eso lo han hecho “la mayoría de los medios y los denominados líderes de opinión”; todos ellos, afirma, buscan favorecer ese espectro político y “demonizar” el opuesto, el de la derecha.
Pero también da otra poderosa razón que ayudó a lograrlo: las redes sociales; Vélez señala que la oposición las utilizó como megáfono para amplificar el discurso contra el Gobierno Duque y que si una voz se distancia “de ese coro es inmediatamente apabullada”.
En ese orden de ideas, el director del noticiero de LA FM, puntualiza:
“Este escenario crea una ilusión equivocada de lo que es la verdad, eleva a nivel de dogma lo que es simplemente otra visión económica y social de las cosas, y estigmatiza a quienes desean mantener una sana mirada escéptica de la coyuntura nacional”.
Vélez también considera que atacar al Estado y estar a favor de las marchas “sin cuestionar nada de ellas” se volvió lo común, y que incluso muchos cantantes, periodistas o deportistas, a quienes considera “privilegiados”, dicen estar de acuerdo con esa política “como si estuvieran haciendo un acto de contrición colectiva por sus casas de verano en Anapoima o apartamentos de lujo en Cartagena o Miami. Paradójico”.
El periodista señala que alejarse de ese pensamiento “no es ser uribista o uribestia”, y que por el contrario es “simplemente no ser de la ahora ‘cool’ centroizquierda”; pero aclara también que “ser crítico de la derecha es ser guerrillero”.
Por eso, lanzó una propuesta para el 2020:
“Será determinante mantener una visión crítica con todos los puntos de vista. Y, para tal fin, reconocer que son eso, puntos de vista, es el primer paso para no terminar como borregos diciendo sí a todo lo que soterradamente algunos nos quieren imponer”.
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