Los datos usados ilegalmente incluyen información sobre ‘me gusta’, redes de amigos e identidades de los usuarios.

“(Esto) la convierte en una de las filtraciones de datos más grandes en la historia de la red social… (y le) permitió a la compañía explotar la actividad de las redes sociales privadas de una gran parte del electorado estadounidense, desarrollando técnicas que respaldaron su trabajo en la campaña del presidente Trump en 2016″, dicen el periódico estadounidense ‘The New York Times’ y el británico ‘The Observer’.

Citando a Facebook, los periódicos dicen que Cambridge Analytica pagó para adquirir la información personal a través de un investigador externo que afirmó que la estaba recolectando para fines académicos.

Lo que es simple manipulación de los usuarios (electores) a partir de su actividad en la red, es descrito por Cambridge Analytica como ‘técnicas de modelamiento psicográfico’.

“La compañía ha dicho que sus ‘perfiles psicométricos’ podrían predecir la personalidad y las inclinaciones políticas de la mayoría de los votantes estadounidenses”, dice ‘The New York Times’.

En el 2013, el gerente de Cambridge Analytica, Alexander Nix, reclutó a un experto vinculado con la campaña de Barack Obama, Christopher Wylie, quien “estaba interesado en usar rasgos psicológicos inherentes para afectar el comportamiento de los votantes y había reunido a un equipo de psicólogos y científicos de datos, algunos de ellos afiliados a la Universidad de Cambridge”, dice ‘The New York Times, agregando que experimentó en África y el Caribe, “donde las reglas de privacidad eran laxas o inexistentes y los políticos que empleaban a SCL (una compañía pariente de Cambridge Analytica) estaban felices de proporcionar datos del gobierno”.

SCL ha trabajado en más de 100 países en lo que llama técnicas de persuasión.

¿Es uno de esos países Colombia?

De eso no hay evidencia todavía, pero el nombre de Cambridge Analytica sí apareció recientemente, cuando en México se denunció en enero la campaña de miedo a la “venezolanización de México” si ganaba el candidato de centro-izquierda López Obrador.

“El equipo de López Obrador y el mismo candidato han acusado el golpe. El candidato de Morena a la Presidencia de la República acusó al publicista de origen venezolano J. J. Rendón de ser el artífice de la reciente campaña de “guerra sucia” en las redes sociales“,  dice la revista Proceso, citando que él se describe a sí mismo como el gurú de la estrategia política en América Latina.

Aunque Proceso no establece ningún nexo entre Cambridge Analytica y JJ Rendón, sí los incluye en el mismo paquete de responsables de la campaña de miedo en México.

Y luego Proceso menciona un artículo del portal económico Bloomberg que asegura que Cambridge Analytica se asoció con Pig.gi, una aplicación telefónica en México y Colombia que ofrece a 200 mil usuarios activos servicios gratuitos a cambio de ver anuncios, leer historias y realizar encuestas.

“La firma espera utilizar datos extraídos de Pig.gi para ayudar a un candidato en las elecciones presidenciales de julio de 2018 en México y varios partidos políticos ya han expresado su interés”, dijo Bloomberg.

J.J. Rendón trabajó en las dos campañas de Santos a la Presidencia (2010 y 2014) a donde llegó precedido por las 22 campañas presidenciales que ha asesorado. En Colombia no lo quieren porque lo consideran el ‘rey de la propaganda negra’.

¿Alguien ha mostrado el mismo interés en Colombia?

No se sabe, pero hace solo días Luis Carlos Vélez preguntó públicamente al candidato Gustavo Petro si había usado los servicios de Cambridge Analytica. Pero este no respondió.

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Es el momento que las demás campañas respondan.

Y cuidado: Cambridge Analytica no solo se dedica a usar algoritmos.

‘The New York Times’ dice que Nix se jactó en enero en un video grabado secretamente por el Canal 4 de Noticias en el Reino Unido “de emplear compañías de fachada y antiguos espías en nombre de clientes políticos de todo el mundo, e incluso sugirió formas de atrapar a políticos en situaciones comprometedoras”.