La incertidumbre y la angustia invaden a la familia de Sara Jiménez Silva, una adolescente de 14 años que desapareció el pasado 10 de diciembre en el barrio Engativá, en Bogotá. La menor fue vista por última vez en un parque cercano a su vivienda y desde entonces no se tienen noticias sobre su paradero.
La madre de Sara, visiblemente afectada, relató los últimos momentos que compartió con su hija antes de que desapareciera:
“En la noche ella durmió en la casa. Cuando amaneció, la fui a buscar y ya no estaba. No sé qué pudo haber pasado, estamos muy preocupados”, declaró a El Tiempo.
El desconcierto de la familia es mayor debido a que la joven, al parecer, salió sin su teléfono celular y sin arreglarse, algo que consideran fuera de lo habitual. A pesar de haber hablado con las amigas de Sara y otras personas cercanas a ella, la familia no ha obtenido pistas sobre lo ocurrido.
“Cualquier dato que pueda ayudar a localizarla es crucial. Si tienen información, por favor, ayúdennos a encontrarla”, pidió la madre con desesperación.
La familia ha interpuesto una denuncia formal ante la Fiscalía, solicitando que el proceso de búsqueda avance con rapidez. Han pasado ya siete días desde que Sara desapareció, y el tiempo apremia para esclarecer las circunstancias de su ausencia.
Las autoridades locales aún no han emitido un pronunciamiento oficial sobre el caso, pero se espera que las investigaciones incluyan el análisis de cámaras de seguridad en la zona y entrevistas con testigos.
Sara Jiménez Silva mide aproximadamente 1,58 metros, tiene cabello negro y, al momento de su desaparición, vestía una pantaloneta gris y un saco negro. La familia ha autorizado la difusión de fotografías de la menor para facilitar su identificación.
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