Bogotá ha enfrentado fuertes lluvias durante los últimos días que han dejado severas inundaciones y emergencias, especialmente en el norte de la ciudad. Uno de los sectores más golpeados es la Autopista Norte, una vía clave que conecta la capital con municipios aledaños como Chía, Cajicá y Zipaquirá.
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Producto de esos fuertes aguaceros, decenas de vehículos quedaron atrapados en el agua, incluso rutas escolares, lo que ocasionó un caos total en ese corredor vial.
Algo que preocupa a los bogotanos es que el Ideam prevé que este jueves 7 de noviembre las precipitaciones continuarán, con pronóstico de lluvias intensas de más del 80 % que podrían afectar nuevamente la movilidad en varias zonas.
La entidad explicó que la mañana de este jueves comenzó con nubosidad variable y condiciones secas, aunque prevé lloviznas intermitentes hacia el final de la mañana en el oriente y sur de la ciudad.
Ya para la tarde, se espera un aumento de la nubosidad y lluvias intensas en el nororiente y suroriente, con posibilidad de actividad eléctrica. Posteriormente, esas precipitaciones se desplazarán hacia Suba, Engativá y Fontibón.
Las autoridades temen que se puedan presentar nuevas inundaciones en la Autopista Norte y la carrera Séptima, además de deslizamientos de tierra como el que se vio en los cerros nororientales y que afectó al menos a 20 viviendas.
Durante la madrugada de este jueves se presentaronn importantes congestionamientos vehiculares, con trancones a la altura de la calle 170 y tramos cerrados desde la calle 235 hasta el centro comercial Santafé.
El alcalde Carlos Fernando Galán decretó la suspensión de las clases en los colegios cercanos al área de la emergencia y en la Universidad de la Sabana. Galán recomendó evitar el uso de la Autopista Norte en lo posible y optar por la carrera Séptima o la calle 80 para salir de la capital. En este momento se presentan demoras y afectaciones en la prestación del servicio de Transmilenio.
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