La Comisión de Asuntos Constitucionales del Senado se reunió para entrevistar a los comisarios de policía que buscan un ascenso dentro del cuerpo y transcurrió sin altercados hasta que el jefe de la Dirección contra Hechos Punibles, Económicos y Financieros de la Policía, Aurelio Marín, tomó la palabra y “agradeció a Dios” por poder intervenir en la Comisión.

El comentario provocó la reacción de Cubas, que contestó a Marín que Dios no tenía “nada que ver” en la Comisión y le lanzó a la cara el tapón de una botella de agua, según se puede ver en las imágenes difundidas en redes sociales.

Cubas se levantó y se fue hasta el asiento de Marín para increparlo y tirarle agua por encima mientras las senadoras Lilian Samaniego, del Partido Colorado, y Desirée Masi, del Partido Democrático Progresista (PDP), intentaban tranquilizarlo sin éxito.

Cubas siguió arrojando agua a los presentes, entre ellos el ministro del Interior, Juan Ernesto Villamayor, que apenas reaccionó, sin que ningún agente policial se lo impidiera.

Solo el chófer y guardia de seguridad del expresidente Fernando Lugo, José Duarte, intentó interponerse, pero recibió un golpe en la cabeza por parte de Cubas.

Lugo gritó al senador de Cruzada Nacional que era un “tarado” y este contestó con una acusación de “bandido” y con un nuevo lanzamiento de agua, al que el expresidente respondió de la misma manera.

Después, Cubas volvió a arrojar un objeto al comisario Marín mientras la senadora Samaniego daba por terminada la sesión a raíz de los altercados.

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A la salida de la comisión, Villamayor calificó la situación como “francamente bochornosa” y aseguró que nadie había resultado herido.

Cubas explicó su reacción ante la invocación de Dios y aseguró que Marín le había levantado la voz durante la sesión.

Tiene 32 años de antigüedad, tiene sobrepeso, está involucrado en narcotráfico, protegió a los Zacarías Irún (clan político imputado por enriquecimiento ilícito, entre otros delitos) y encajó un balinazo de acero a mi mujer en Ciudad del Este“, agregó Cubas al referirse a su oposición al ascenso de Marín.

Cubas también se refirió a su ataque a Fernando Lugo, “por putero”, y a su guardaespaldas por ir “armado” dentro de la sesión.

El senador de Cruzada Nacional protagonizó otro altercado similar durante la primera sesión del Senado este año, después de que la senadora María Eugenia Bajac, del Partido Liberal, comenzará con una oración.

Cubas se opuso al rezo y recordó a los legisladores que “Dios no tiene partido político”.