“Desgraciadamente, en América Latina no se han alcanzado los niveles más bajos de transmisión del brote, que permiten decir que se llegó al pico de la enfermedad”, manifestó este miércoles en rueda de prensa Mike Ryan, director de Emergencias Sanitarias del organismo.

El funcionario, igualmente, señaló que los diferentes gobiernos de la zona tienen que seguir manteniendo una clara comunicación con sus ciudadanos para que haya una respuesta comunitaria a la pandemia del coronavirus.

A pesar de las medidas restrictivas y los confinamientos que siguen vigentes en casi todos los países del continente, el número de casos de contagio y decesos aumentaron entre un 25 y 50 % en la última semana.

“Muchas naciones siguen teniendo una transmisión comunitaria sostenida. La llegada del pico y el comportamiento posterior de la enfermedad tienen que ver mucho con lo que haga cada territorio. Hay que actuar a todos los niveles y usar todos los recursos”, agregó el científico irlandés.

La jefa del Departamento de Enfermedades Emergentes de la OMS, María Van Kerkhove, añadió que la situación podría agravarse en algunas zonas de Suramérica que están entrando en los meses más fríos del invierno austral, ya que coinciden con la temporada de dolencias gripales.

El organismo, por último, advirtió que el mundo podría llegar a los 10 millones de casos de coronavirus la semana que viene debido a que en muchos países del continente americano todavía no se ha presentado el pico de la enfermedad.

De acuerdo con el último balance de la Universidad Johns Hopkins, en América Latina se han presentado hasta el momento 97.700 decesos asociados al COVID-19 y más de 4,5 millones de infecciones diagnosticadas, siendo Brasil el país más afectado.