El Estado Islámico (EI) perdió en Baghuz su último reducto en Siria, pero todavía puede contar en el mundo con varias filiales y “provincias”, como las califica, para perpetuar su ideología y su lucha.

Donald Trump y Estado Islámico

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En su último informe sobre el tema, publicado en febrero, el secretario general de la ONU Antonio Guterres mostró una lista de las ocho zonas de influencia, además de las células clandestinas creadas en Siria y en Irak, donde la organización yihadista más temida en el mundo todavía está activa y podría seguir así en el futuro próximo.

“Aunque el EI se haya transformado en una red clandestina, incluida en Siria y en Irak, sigue siendo una amenaza como organización global dotada de una dirección centralizada”, estimó el secretario general en su informe, el octavo que elabora sobre este asunto.

  1. Yemen: Sigue presente en la provincia de Jawf, pero se ha debilitado a raíz de los combates con la filial local de Al Qaeda. “El EI todavía tiene campamentos móviles y un número de combatientes en disminución en todo el país”, estimó la ONU.
  2. Libia: “Sus combatientes están activos en la costa mediterránea, entre Ajdabiya y Trípoli, así como en el gran sur”, donde con regularidad ejecutan ataques contra puestos de la policía con el fin de quedarse con las armas, de acuerdo con Naciones Unidas.
  3. Egipto: Su filial Ansar Bayt al Maqdis, con base en el desierto del Sinaí, no ha visto disminuir el número de sus combatientes en 2018 a pesar de las constantes operaciones en su contra por el ejército egipcio.
  4. África: “El EI en el gran Sahara”, comandado por Adnan Abu Walid al Sahraui, cuenta con entre 100 y 200 combatientes en el centro norte de Mali. El Grupo Islámico de África del Oeste (ISWAP, según las siglas en inglés), es una facción del grupo Boko Haram compuesta por entre 1.500 a 3.500 yihadistas en la frontera de Chad, Níger y Nigeria.
  5. Somalia: El movimiento yihadista está dominado por el grupo de los shebab, afiliados a Al Qaida, pero un grupo asociado al EI “coexiste con ellos”, desde mediados de 2018, estima la ONU.
  6. Afganistán: “El EI dispone de campos de entrenamiento en Afganistán y creó una red de células clandestinas en varias ciudades afganas, incluido Kabul”, precisa la ONU.
  7. Asia Central: En esta región “el EI busca ampliar sus actividades”, estima el informe de la ONU, que mencionó el asesinato en julio de 2018 de cuatro turistas extranjeros que viajaban en bicicleta en Tayikistán.
  8. Indonesia: El grupo asociado al EI, Jamaah Ansharut Daulah, realizó una serie de ataques organizados a la par por yihadistas que regresaron de la zona siria-iraquí.

A estas zonas de influencia se suman, según advierte el Secretario General de la ONU, los miles de veteranos de la yihad iraquí-siria que lograron regresar a sus países de origen, algunos de los cuales pudieron hacerlo sin ser detectados. Otros han sido juzgados o encarcelados, pero finalmente serán liberados un día y podrían continuar representando una amenaza.