El estudio fue realizado sobre 126.000 informaciones verdaderas y falsas entre 2006 y 2017, difundidas por Twitter por tres millones de personas más de 4,5 millones de veces.

Para efectuar eficazmente la distinción entre noticias verdaderas y engañosas, el equipo trabajó con seis organizaciones independientes de chequeo de datos.

Las informaciones engañosas son en promedio difundidas más rápidamente y más ampliamente que las verdaderas, según los investigadores del Massachusetts Institute of Technology (MIT).

En promedio, las verdaderas informaciones requieren seis veces más de tiempo que las engañosas para llegar a 1.500 personas, según sus análisis.

La diferencia es aún más marcada para noticias políticas que para las relativas al terrorismo, a las catástrofes naturales, a la ciencia, las leyendas urbanas o las noticias financieras.

El artículo continúa abajo

Aunque muchos se inquietan de la difusión de noticias engañosas por parte de ‘bots’ -programas informáticos que realizan operaciones de internet por sí solos- el estudio reveló que la propagación de este tipo de informaciones se debe sobre todo a la acción humana.

Esta propensión a difundir informaciones falsas podría deberse según el estudio a que son muy novedosas y sorprenden más a los lectores que las verdaderas informaciones.

Las cuentas Twitter que publican informaciones falsas tienen también en promedio menos seguidores, siguen menos cuentas y son menos activas que las cuentas de quienes tuitean verdaderas informaciones.

La investigación del fiscal especial estadounidense Robert Mueller sobre la injerencia rusa en la campaña electoral de Estados Unidos para las presidenciales de 2016 hizo mucha referencia al uso de los ‘bots’.

Según la investigación, se utilizaron ‘bots’ para favorecer al magnate inmobiliario republicano Donald Trump, que triunfó en los comicios sobre la demócrata Hillary Clinton, y para acentuar la polarización en la población estadounidense.

A fines de febrero, Twitter publicó nuevas reglas que buscan limitar la influencia de los ‘bots’ en el funcionamiento de las redes sociales.

Con AFP