Ji Han era participante del ‘reality’ surcoreano ‘Produce 101’, en su segunda temporada. Su debut profesional se dio en 2017, en la farándula surcoreana, con el drama ‘Today Was Another Nam Hyun Day’.

“Es desgarrador saludar con una triste noticia. El actor Lee Ji Han, un precioso miembro de la familia de 935 Entertainment y 9Ato Entertainment, se ha convertido en una estrella en el cielo y nos ha dejado”, informó en Instagram la empresa que representaba al artista.

Casi todas las víctimas mortales de la tragedia en Seúl han sido identificadas, y entre ellas hay una mayoría de mujeres (98), la mayor parte de entre 20 y 30 años, y 26 ciudadanos y ciudadanas con pasaportes extranjeros.

Se trata de personas de nacionalidad iraní (5), china (4), rusa (4), japonesa (2), estadounidense (2), además de un uzbeko, un esrilanqués, un francés, un australiano, un noruego, un tailandés, un austriaco, un vietnamita y un kazajo.

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Entre tanto, el presidente surcoreano, Yoon Suk Yeol, abrió el altar en memoria de las 154 personas muertas en la aglomeración durante una fiesta de Halloween. A su vez, las autoridades enfrentaron acusaciones de que la falta de control policial provocó el desastre.

En un memorial improvisado junto a una estación subterránea en el popular distrito de Itaewon, donde ocurrió la tragedia, la gente se detuvo para orar y dejar flores.

Hasta 100.000 personas, en su mayoría jóvenes y muchos con disfraces de Halloween, acudieron a las pequeñas y sinuosas callejuelas de Itaewon; testigos citaron la falta de seguridad y de control de multitudes.

La policía dijo que envió a 137 oficiales al sitio, una cifra que señaló como superior a la de años previos. Pero informes locales indicaron que los policías enviados estaban más enfocados en vigilar el uso de drogas que en el control de la multitud mortal.

Tragedia en Corea del Sur: autoridades no se hacen cargo por lo que pasó

En redes sociales se divulgaron reclamos de que la policía este año no controló la aglomeración y permitió que mucha gente se congregara alrededor de la estación subterránea y en la callejuela que fue epicentro del desastre.

Sin embargo, el gobierno surcoreano defendió el plan policial. “No fue un problema que se hubiera resuelto enviando policías o bomberos por adelantado”, declaró a periodistas el ministro del Interior, Lee Sang Min.