Trump dedicó gran parte de su esperado discurso a atacar a sus enemigos, especialmente a Corea del Norte, que ha insistido en sus pruebas nucleares y con misiles balísticos a pesar de las sanciones impuestas por la ONU y respaldadas por la mayoría de países del mundo. El mandatario advirtió con vehemencia:

“Estados Unidos tiene gran poder y paciencia, pero si es forzado a defenderse y defender a aliados, no tendremos otra opción que destruir totalmente a Corea del Norte. El ‘Hombre Cohete’ (Kim Jong-un) está en una misión suicida para sí mismo y para su régimen”.

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Frente a los representantes de todo el mundo, Trump también se refirió al tema de Siria, y calificó al gobierno de Bashar Al Assad de “régimen criminal”, al tiempo que recordó el ataque con armas químicas que habría ordenado el mandatario contra sus opositores, el cual tuvo su respectiva respuesta de Estados Unidos, con 59 misiles disparados contra un aeródromo y una base militar en abril pasado.

Por otro lado, Trump llamó a Irán “nación paria”, y criticó nuevamente el acuerdo nuclear de ese país, al que consideró uno de los peores tratos en el que Estados Unidos pudo entrar, cita The New York Times. Pese a las críticas, ese medio dice que recientemente inspectores no encontraron evidencia de que Irán esté violando el acuerdo. Trump y sus colaboradores más cercanos han atacado a ese país de Medio Oriente por supuestamente financiar el terrorismo en esa región.

El presidente estadounidense también habló sobre la crisis social en Venezuela y sobre el colapso que ha producido la “dictadura socialista” de Nicolás Maduro, que ha “causado mucho daño a ese pueblo” al imponer esa “ideología fallida”. Agregó que las instituciones democráticas del país están siendo destruidas y advirtió que su país como ” responsable vecino y amigos” no se puede quedar quieto. Por eso anunció que ayudará a restaurar la democracia en el país, a cuyo gobierno calificó de “inaceptable”.

En su intervención, también habló del derecho que, como presidente de Estados Unidos, tiene de poner los intereses de su país primero, así como los mandatarios de los demás países “deberían” hacer lo mismo, agrega The Washington Post.

“No esperamos que los países compartan la misma cultura, valores o sistema de gobierno, pero esperamos de todas las naciones que mantengan su soberanía y respeten los intereses de su propio pueblo y los derechos de otras naciones soberanas”, dijo Trump.