El acusado se enfrenta a una pena de 25 años de prisión por el crimen de Romina Celeste Núñez, ocurrido en 2019

El marido de la joven paraguaya Romina Celeste Núñez admitió finalmente este viernes que la mató la madrugada del día de Año Nuevo de 2019 en el domicilio conyugal de la isla atlántica española de Lanzarote y luego hizo desaparecer el cuerpo. Así lo declaró ante el tribunal que lo juzga por un delito de asesinato con alevosía y otro de maltrato habitual.

El acusado, Raúl D.C., de nacionalidad española, se había negado a confesar los hechos durante la instrucción del caso y había mantenido que su esposa se había marchado voluntariamente de la casa tras una discusión. Sin embargo, ante el inicio del juicio oral, cambió su versión y reconoció su responsabilidad en el crimen.

(Vea también: Policía habría disparado y asesinado a hombre en la calle, en medio de confusos hechos)

Los detalles del caso que conmocionó a la isla

Según el relato del acusado, la noche del 31 de diciembre de 2018 él y su esposa habían consumido alcohol y drogas, y habían tenido una fuerte discusión por celos. En un momento dado, él le propinó un golpe en la cabeza que le causó la muerte. Luego, entró en pánico y decidió deshacerse del cuerpo.

Para ello, lo descuartizó con un cuchillo y lo metió en varias bolsas de plástico. Después, lo trasladó en su coche hasta diferentes puntos de la costa de Lanzarote, donde lo arrojó al mar. También quemó algunas pertenencias de su esposa y limpió la escena del crimen.

El cuerpo de Romina Celeste Núñez nunca fue hallado, pese a las intensas labores de búsqueda que se realizaron durante meses. Solo se encontraron algunos restos biológicos en el coche y en la casa del acusado, que permitieron confirmar su identidad.

Lee También

La fiscalía pide para el acusado una pena de 25 años de prisión por el delito de asesinato con alevosía, al considerar que actuó con ensañamiento y sin dar opción a la víctima a defenderse. Además, solicita otros tres años más por el delito de maltrato habitual, al acreditar que el acusado sometía a su esposa a un trato vejatorio y humillante desde hacía tiempo.

La defensa, por su parte, pide la absolución por el delito de asesinato y solo reconoce el de maltrato habitual. Alega que el acusado actuó bajo los efectos de las drogas y el alcohol, y que no tuvo intención de matar a su esposa.

El juicio continuará la próxima semana con la declaración de los testigos y los peritos. Se espera que el tribunal dicte sentencia antes de finales de mes.

Quién era Romina

Romina nació en Paraguay en una familia muy humilde. Con solo 20 años, emigró a España en busca de un futuro mejor. Allí dejó a un hijo al cuidado de su padre. En Madrid, conoció a Raúl Díaz, un hombre que ejercía la prostitución ocasionalmente. Se casaron en agosto de 2018 y se trasladaron a Lanzarote.

Sin embargo, su relación fue conflictiva desde el principio. Raúl la agredía física y verbalmente, la trataba con desprecio y la aislaba de su entorno. Romina vivía en un estado de angustia y miedo constante. Según su madre, Miriam Rodríguez, Romina quería separarse de su marido y volver a Paraguay con su hijo.