El joven que sobrevivió quedó con heridas de gravedad. La Fiscalía de Tanta (norte) afirmó en un comunicado que ha decidido detener al revisor que les “obligó a saltar” del tren procedente de Alejandría, citando la versión de las denuncias registradas por varias personas tras el incidente y hasta que se lleve a cabo una investigación.

El incidente tuvo lugar a la altura de la provincia de Al Gharbia, al norte de El Cairo, en una zona rural, y la decisión de arrestar al revisor y al jefe del tren fue tomada después de que varios pasajeros se acercasen a la comisaría de Tanta a presentar denuncias.

Por su parte, la Autoridad Ferroviaria Nacional de Egipto identificó en otra nota a las víctimas como dos vendedores ambulantes que ofrecían productos a los pasajeros: Mohamed Eid, de 23 años (el que murió), y Ahmed Mohamed, de 25.


Según el comunicado, el tren cubría la ruta entre Alejandría (norte) y Luxor (sur) y los jóvenes “rechazaron” pagar el billete, por lo que “bajaron del tren en marcha”.

Uno de ellos cayó entre las ruedas del tren, perdiendo la vida en el momento, y el otro resultó herido de gravedad y fue trasladado al Hospital General de Tanta.

En Egipto son frecuentes los accidentes ferroviarios debido al mal estado de las vías y de los vehículos, así como a la falta de un sistema moderno de señalización y control de tráfico.

La mayor tragedia ferroviaria de la historia de Egipto, en la que murieron 376 personas, ocurrió en 2002 al incendiarse un tren que cubría el trayecto entre El Cairo y la ciudad monumental de Luxor.