Luis Lorenzo Duarte Rodríguez, de 37 años de edad, murió en el Hospital Universitario ‘Erasmo Meoz’ de Cúcuta el pasado martes 26 de febrero, por lo cual su padre decidió llevarlo a su país para darle santa sepultura, relata el portal El Pitazo.

Luis Duarte nació en Ureña y durante casi toda su vida vivió en el estado de Bolívar, trabajando como minero, pero en 2018 le diagnosticaron cáncer en el hígado, lo que lo obligó a dejar su trabajo y volver a su tierra natal, explica ese medio.

Hace 15 días, cuando el paso fronterizo todavía estaba abierto, pasó a Colombia para hacerse un tratamiento, pero tuvo una fuerte recaída que le terminó quitando la vida. Por eso su padre, un colombiano con rasgos indígenas, quiso llevarlo a Venezuela por el puente Simón Bolívar, pero solo recibió la indiferencia de la guardia chavista, explica El Pitazo.

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José Duarte, desde el miércoles 27 de febrero, solicitó ayuda de Defensa Civil colombiana para poder mediar con las autoridades venezolanas y tramitar un “pase humanitario”. Los oficiales a cargo de cuidar la frontera la dijeron que no tenían autorización y que debían consultar con Caracas.

Al no tener una respuesta positiva, José decidió llevar el ataúd con el cuerpo de su hijo a Venezuela por una trocha, uno de los tantos pasos ilegales entre Colombia y Venezuela, indica el medio venezolano.

Duarte tuvo que contratar a 8 ‘trocheros’ (personas que ayudan a cruzar la frontera) para que le ayudaran a cargar el ataúd. Estas personas explicaron a El Pitazo que sin peso tardarían 15 minutos en llegar a San Antonio del Táchira, por lo que estimaban que con la carga del ataúd sería entre 30 y 40 minutos caminando.

Según funcionarios del Hospital Universitario “Erasmo Meoz”, desde que Maduro cerró la frontera hasta el paso peatonal, han ingresado la morgue tres venezolanos más que no han podido ser retirados por sus familiares porque no tienen cómo cruzarlos hacia su país, finaliza el portal venezolano.