Alrededor de las 6 de la tarde del domingo, un hombre no identificado abrió fuego en la plazoleta de comidas de un centro comercial en Indiana. Dejó 3 muertos y 2 heridos, hasta que fue abatido por un ciudadano armado.

Así lo dio a conocer el jefe de la policía de Greenwood, Jim Ison, que lamentó lo sucedido y elogió al transeúnte: “Esto nos ha sacudido hasta la médula. No es algo que hayamos visto antes en Greenwood”, sostuvo.

“El verdadero héroe del día es el ciudadano que portaba legalmente un arma de fuego en esa zona de restaurantes y fue capaz de detener a este tirador casi tan pronto como comenzó”, declaró el oficial.

El tiroteo se llevó a cabo en la ciudad de Greenwood, en el centro comercial, Greenwood Park Mall. Entre las víctimas se encuentran un hombre y 4 mujeres, una de ellas una niña de 12 años que fue herida. Ison también reportó la muerte del tirador, dejando un balance total de 4 muertos.

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Este incidente hace parte de una ola de masacres con armas de fuego llevadas a cabo recientemente en Estados Unidos, entre las cuales resaltan el tiroteo en una escuela primaria de Uvalde, Texas, que dejó muertos a 19 niños y 2 maestros; la masacre en un suburbio de Chicago el 4 de julio que dejó 7 muertos; y el homicidio de 10 afroestadounidenses en un mercado de Buffalo.

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Según el Archivo de Violencia Armada de Estados Unidos, citado por CNN, ha habido 350 tiroteos masivos este año en el país. Esa entidad define tiroteo masivo como uno en el que se presentan 4 o más víctimas de disparos. Además, registra más de 40.000 muertes al año por armas de fuego.

Esta serie de masacres provocó fuertes debates sobre la posible regulación de las armas de fuego en el país. La instauración de controles más rigurosos para el porte de armas ha sido propuesta como una manera de enfrentar el problema y está siendo debatida en el Congreso estadounidense.

Con información de AFP.