Un grupo de astrónomos en el Observatorio de Cerro Tololo, en Chile, detectaron tres asteroides cercanos a la Tierra (Nea por sus siglas en inglés). Esto significa que, en términos astronómicos, están cercanos a nuestro planeta, pero no representan un riesgo real para él, por ahora. Los asteroides estaban ocultos por el resplandor del Sol, por lo que los científicos solo pudieron identificarlos hace poco.
Uno de ellos, el asteroide llamado 2022 AP7, fue descubierto en enero de este año, al utilizar la Cámara de Energía Oscura del Observatorio de Cerro Tololo. Este asteroide es de 1,5 kilómetros de ancho y tiene una órbita que algún día podría colocarlo en el camino de la Tierra, hasta acercarse a unos 7 millones de kilómetros del planeta.
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Eso convierte a 2022 AP7 en “el asteroide potencialmente peligroso más grande encontrado en los últimos ocho años más o menos”, según Scott Sheppard, astrónomo de la Carnegie Institution for Science en Washington, D.C.
Después de que astrónomos lo identificaran por primera vez a inicios de este año, otros observatorios estudiaron su movimiento y lo detectaron en imágenes más antiguas. En todo caso, los datos que se han recopilado apuntan a que, si algún día este asteroide representa un riesgo para la Tierra, será hasta el próximo siglo, o incluso más tiempo.
Los otros asteroides se identificaron como l2021 LJ4 y 2021 PH27 y tienen órbitas que “permanecen seguras hacia el interior de la órbita de la Tierra”, dijeron los astrónomos.
El asteroide 2022 AP7 también fue interesante para los científicos porque es muy grande y, aún así, permaneció oculto detrás del resplandor de Sol. Los asteroides potencialmente peligrosos, como este, son aquellos que se acercan al menos a 7.4 millones de kilómetros de la Tierra y que son demasiado grandes para incinerarse por la atmósfera de nuestro planeta.
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Por su gran tamaño, se les conoce como “destructores de planetas”, ya pueden causar daños en escalas masivas. El descubrimiento de 2022 AP7 sugiere que puede haber asteroides con estas características que están velados por el resplandor del Sol, sin ser descubiertos.
El proceso para avistar estos asteroides es difícil, explicaron los astrónomos a través de un comunicado, porque solo hay dos ventanas pequeñas de 10 minutos cada noche para inspeccionar áreas de interés. Al mismo tiempo, se tiene “que lidiar con un cielo de fondo muy brillante debido al intenso resplandor del Sol”.
Sheppard agregó, sin embargo, que probablemente solo queden unos pocos asteroides con características similares a las de 2022 AP7 por encontrar. “Estos grandes asteroides no descubiertos probablemente tengan órbitas que los mantengan en el interior de las órbitas de la Tierra y Venus la mayor parte del tiempo. Hasta la fecha, solo se han descubierto unos 25 asteroides con órbitas completamente dentro de la órbita de la Tierra debido a la dificultad de observar cerca del resplandor del Sol”, indicó el astrónomo.
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