Aunque se trata de imágenes de gravedad por tratarse de reconocidos cabecillas criminales, y porque se manejan versiones que les atribuirían alguna mediación para el paso de Guaidó a Colombia en febrero pasado, los argumentos de sus dos representantes resultaron bastante livianos.

“A eso no hay que darle mayor importancia. Eso es una cosa digamos anecdótica”, dijo el diplomático Humberto Calderón Berti, en un mensaje publicado en Twitter.

Guaidó

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Calderón Berti también minimizó el hecho de que uno de los fotografiados con Guaidó estuviera armado. “En la frontera todo el mundo está armado, lo extraño sería que no estuviera armado”, dijo.

El diplomático aseguró que la de Colombia y Venezuela es “una frontera muy permeable, donde hay mucha delincuencia común, donde hay paramilitares, exguerrilleros, guerrilleros, narcotraficantes”.

“Esa foto se la pudo sacar con cualquiera, como se la toma uno cada rato”, añadió Calderón Berti, quien dijo que él mismo se saca fotografías con gente que no conoce y que lo para en la calle para saludarlo. “Uno no va por la calle pidiéndole las cédulas y antecedentes a las personas que piden una foto”, añadió.

Con un argumento parecido parecido la senadora del Centro Democrático Paloma Valencia intentó explicar las fotos, e incluso llegó a decir que “los ‘rastrojos’ no son ‘paras'”.

Paloma Valencia

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Alberto Ravell, vocero del también presidente de la Asamblea Nacional venezolana, dijo lo mismo a Blu Radio: “Estos señores se acercaron y le dijeron: presidente Guaidó, ¿nos podemos tomar una foto? Eso fue todo lo que pasó”, aseguró, y luego añadió una frase contundente:

“¿Tú crees que si él supiera que eran Los Rastrojos se la iba a tomar? Ni que fuera imbécil”

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