La semana pasada, una mujer de nacionalidad colombiana apareció muerta en una playa de Marbella (España). Según informó EFE, el responsable del asesinato sería la expareja de la mujer, sobre quien pesaba una orden de alejamiento y prohibición de ponerse en contacto con ella.

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El sospechoso se declaró culpable y detalló que cometió el homicidio junto a un amigo que le ayudó a lanzar el cuerpo descuartizado al mar. Sin embargo, las olas lo devolvieron a la costa y fue visto por las autoridades.

En ese momento, solo fue encontrado el torso; no tenía extremidades. Hoy, la policía española confirmó que encontró las manos de la mujer en la costa de Málaga, a unos cuantos kilómetros de donde flotó el cadáver.

Un ciudadano vio una de las manos y alertó a los servicios de emergencias, que avisaron a los cuerpos de seguridad. Agentes de la policía rastrearon el área, confirmaron su localización y, durante el despliegue, encontraron una segunda mano cerca.

Luego del respectivo cotejo de la huella del dedo índice de una de las manos, se confirmó que pertenece a la mujer fallecida, identificada como Natalia M.

Caso de colombiana asesinada en España

Ella había presentado una denuncia por violencia de género en contra de su expareja, un colombiano de 45 años, a mediados de diciembre de 2022.

El sujeto habría incumplido la medida de restricción y contactó a la mujer para amenazarla, según han explicado los familiares de la desaparecida a los agentes de policía.

El autor confeso del crimen está en prisión provisional, y también fue detenido un segundo hombre amigo suyo, por supuesta cooperación en el crimen, aunque quedó en libertad condicional.

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