El pasado martes, decenas de caminantes  llegaron a al consulado de EE. UU. en esa zona y entregaron una carta con varias peticiones, dando un plazo de 72 horas para obtener respuesta, relata el diario BBC.

La entrada a Estados Unidos o dinero para regresar a sus respectivos países. La primera petición es la misma que tienen desde que dejaron sus hogares en octubre, poder ingresar a EE. UU., pero: “Si usted no desea nuestro ingreso a su territorio le pedimos que se lleve a Juan Orlando Hernández (presidente de Honduras) y nos otorgue una cantidad de 50.000 dólares estadounidenses, para que cada uno de nosotros podamos retornar”.

“Le recordamos que si EE. UU. no quiere más migraciones, debe poner un alto a la intervención económica, política y militar en nuestro territorio”, se lee en la misiva dirigida a Donald Trump.

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La gigante caravana, que llegó casi a 8.000 integrantes, se ha ido desintegrando debido a la negativa del gobierno estadounidense de no dejarlos entrar a su país, ni siquiera dándoles asilo político, explica el rotativo británico.

Alfonso Guerrero, en diálogo con el diario Los Ángeles Times, dijo que el dinero que están pidiendo es para cada miembro de la caravana: “Puede parecerte mucho dinero… Pero es una suma pequeña comparada con todo lo que Estados Unidos le ha robado a Honduras”.

“Le agradecemos nos brinde asilo para proteger nuestra seguridad o nuestra vida, de usted depende el mejor desenlace de esta crisis humanitaria”, finaliza el mensaje.