Ali Elmezayen, un israelí radicado en Estados Unidos, manejaba un Honda Civic del 98, a su lado iba su esposa y sus hijos estaban en la parte de atrás, con el cinturón de seguridad, cuando supuestamente perdió el control y se fue al agua tras romper las barreras del muelle de Los Ángeles, detalla The Washington Post.
De acuerdo con el diario estadounidense, Elmezayen emergió después de caer al agua, pues su ventana estaba abierta. Luego, nadó hacia la orilla del muelle, mientras varios pescadores lo miraban sorprendidos, y su esposa también logró salir y empezó a gritar desesperadamente: “¡Mis hijos, mis hijos!”.
Al inicio, todo indicaba que era un horrible accidente de acuerdo con las declaraciones de Elmezayen, pero fiscales federales de Los Ángeles dicen que el propósito claro era el de acabar con la vida de sus hijos y que todo fue parte de un plan para cobrar 6 millones de dólares de 7 seguros de vida, explicó el Washington Post.
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“Este caso alega un plan calculado y de corazón frío para sacar provecho de las muertes de dos niños indefensos… La supuesta conducta sorprende a la conciencia y utilizaremos todas las herramientas disponibles para garantizar que se haga justicia”, dijo Nick Hanna, abogado de los Estados Unidos en el Distrito Central de California, en declaraciones recogidas por el rotativo norteamericano.
A pesar de ello, La Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Los Ángeles se negó a acusar a Elmezayen de la muerte de sus hijos por evidencia insuficiente, pero se seguirá investigando, informó la Associated Press.
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