Hace poco la gran empresaria y madre de las hermanas Kardashian Jenner estuvo a prueba en el polígrafo mientras disfrutaba de un show con su hija Kylie Jenner y James Corden.

En el programa, la matriarca tuvo que someterse a algunas acusaciones que, rápidamente, debía responder y así se sabría si afirmaba o desmentía los hechos. 

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Una de las preguntas que más ha causado controversia ha sido el polémico video que se filtró de una de sus hijas mayores, Kim Kardashian, grabación sexual que, aunque trajo grandes pesadillas para la familia, también fue el momento en el que todas las hermanas se impulsaron a la fama, evidentemente Kim fue la que más saltó en ese entonces.

Por ello, se le cuestionó si habría sido ella quien la había ayudado a filtrar el clip, a lo que Kris de manera rápida y contundente dijo que no, lo que finalmente la máquina de la verdad corroboró diciendo que, lo que había dicho la mánager de las Kardashian era completamente cierto.

En medio de las risas surgieron más preguntas, donde se encontraba aquella en la que debía revelar quién era su hija favorita, a lo que confirmó que se trataba de la pequeña del clan, Kylie Jenner.

Lo cierto es que ahora, parece que quien ha sentido gran envidia ha sido Kim Kardashian, pero no por no haber asistido con su madre al show, pues se debe a un costoso regalo que recibirá su hija mayor, North West, por parte de su madre según lo ha dejado claro Kris Jenner en su testamento y es que, no podemos negar que los menores de la familia han estado acostumbrados durante toda su vida a vivir llenos de lujos, sin medida alguna. Luciendo los mejores atuendos de diseñadores y accesorios de reconocidas más.

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Kim, quien hace poco hizo parte de ‘Late show with James Corden’, mismo programa en el que anteriormente estuvo su madre con su hermana, allí confesó que su primogénita North West heredará de su abuela una pieza bastante lujosa, costosa y especial que supuestamente iba a ser de Kim. 

Todo se trata de un bolso Chanel, un diseño único y exclusivo que Jenner recibió de las manos del propio Karl Lagerfeld cuando Kim realizó un par de fotos con el fallecido director creativo de la marca francesa. Dichas fotos se hicieron cuando ella estaba embarazada. “El rumor decía que él te daría una cartera en el set si era tu primera sesión con él… Estaba tan emocionada, estaba soñando con qué tipo de bolso me daría”, explicaba la Kardashian.

Sin embargo, todo tomó un giro inesperado para la creadora y dueña de ‘Skims’, pues si bien a la final de la sesión Kim estaba ansiosa de recibir su nueva reliquia y allí el diseñador sacó uno de los famosos modelos Lego de la firma de lujo francesa. “Era una pieza única, se había confeccionado para la pasarela y ni siquiera fue a producción. Yo estoy literalmente: este es el momento. Él me va a dar el bolso… Entonces va y se lo da a mi madre”, comentó en risas.

La reacción de Kim fue tan dramática que se fue al baño a llorar: “Estoy embarazada, con las hormonas, había volado hasta París para esto. Llamé a mi prima CiCi y le dije ‘esta bitch me robó el bolso’”. Por suerte para la empresaria dicho bolso, seguramente quedará en manos de su hija mayor ya que en el testamento de Kris Jenner, ella dejó claro a quién iría ese lujoso accesorio.