El pasado 24 de diciembre de 2019, hace más de 4 años, se conoció el caso de un carro Renault Symbol que terminó con varios impactos de bala de dos fusiles M-16 cuando transitaba por las calles de un exclusivo barrio de Ocaña. El vehículo era conducido por uno de los nietos del reconocido cantante ‘Poncho’ Zuleta, quien terminó gravemente herido, según informó El Tiempo.
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El joven fue identificado como Josué Zuleta Jaimes, quien ingresó al hospital Emiro Quintero Cañizares de Ocaña con graves heridas en su cuerpo por las balas que lo impactaron, las cuales fueron accionadas por uniformados de la Policía de ese municipio, según el rotativo.
Ambos agentes fueron identificados como Daniel Arley Pedraza Mendoza y Sergio Ricardo Sierra Roso, quienes le dijeron a la Fiscalía que accionaron sus armas como medida de protección, pues el carro en mención casi los arrolla. Incluso, manifestaron que alcanzaron a escuchar dos disparos, de acuerdo con el periódico.
Cómo está el nieto de ‘Poncho’ Zuleta que recibió varios disparos
En medio de este problema, el caso ha quedado como paralizado, al menos así lo ha dicho Emiliano Zuleta, hijo mayor del cantante ‘Poncho’ Zuleta y padre de Josué Zuleta, quien asegura que después de 4 años de lo sucedido no hay todavía responsables de lo que le pasó a su hijo.
“Cuando le dispararon a mi hijo, la Policía dijo estar dispuesta a colaborar, de hecho nos trasladaron en un avión de la Institución a la ciudad de Bogotá para que mi hijo fuera intervenido, pero hasta ahí quedó todo. Mi hijo está casi perdiendo el brazo y necesita operaciones muy costosas que yo no puedo pagar“, indicó en el impreso.
De igual manera, indicó en la entrevista que se encuentra en una crisis económica, pues ya no tiene recursos para financiar los tratamientos médicos del joven: “A raíz de lo que le sucedió a mi hijo nos tuvimos que radicar en un municipio de la sábana de Bogotá, yo soy médico cirujano y no pude seguir trabajando, he vendido todo lo que tenía, lo último que hice fue hipotecar una finca en Pelaya (Cesar), y vendí otras propiedades”.
Además, Zuleta ha dicho que ha recibido amenazas y que no ha podido volver a su pueblo por esta situación: “Pensé en regresar a Ocaña con mi familia, pero me llaman constantemente y me dicen que no tengo nada que ir a hacer allá, que deje el caso de mi hijo quieto. Estamos a la espera de que la Policía indemnice a mi hijo a quien le dañaron por completo su vida, pero hasta ahora no hay ni siquiera una imputación”.
Por ahora, lo que se sabe del caso es que está en la Justicia Penal Militar y, según el abogado de uno de los policías en el citado medio, estos procesos gozan de una reserva sumarial, por lo que podrían demorarse más.
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